No siempre es fácil saber cómo se debe presentar una mesa en un negocio de hostelería. Como veo todos los días en mi restaurante, hay que atender a la mantelería, las decoraciones, las vajillas o la cristalería, donde terminamos por comprar los vasos y copas en gionapremiumglass.com, por la gran calidad de sus cristales y que tenían el tipo de vasos que necesitaba, pues estaba cansado de comprar en otros lados vasos que me duraban una temporada y en malas condiciones.
Hablando de cristalería vamos a dar una serie de consejos para manipular cristalería:
Lavavajillas
Se colocan boca abajo y sin que se toquen. Utilizan agua tibia y detergentes suaves. Si cuentan con detalles mentalizados o es cristal, es necesario que se laven a mano.
Secado
Debe ser al aire y en el caso de que queden restos de agua, se hacen con un paño de microfibra. No se deben guardar a medio sacar, puesto que aparece moho.
Carritos
Con ellos se pueden transportar para poner mesas o recogerlas cuando se sacan del lavavajillas.
Manipulación
Bien sea vasos o copas, nunca debemos cogerlos por la parte de arriba. Pensemos que los vasos se tienen que agarrar por la base o parte central y las copas por el tallo. Todo ello lo que hace es evitar roturas y es bastante más higiénico.
Consejos para el almacenamiento
Aquí vamos a ver una serie de útiles consejos
Muebles: las vitrinas cuando están cerradas son una buena opción de cara a evitar que pueda entrar polvo. Como la pared frontal va a ser de cristal, esto puede hacer que se localice la cristalería de forma más sencilla.
Apilar
Evitamos la colocación de los vasos unos por encima de otros, puesto que lo que hace el roce es provocar grietas. Si se pueden apilar no deben ser de más de dos o tres juntos. Pensemos que se debe dejar como mínimo medio centímetro entre las piezas. Las copas no se deben apilar nunca.
Colocación de alfombrillas
Lo que hacen es evitar roturas y se permite la circulación de aire. Para ello hay que colocar vasos o copas por el tipo.
Clases de cristales para restaurante o bar
Lo cierto es que la gama es bastante amplia, para ello, hay que saber las diferentes opciones que hay, todo dependiendo de las opciones.
Copas de vino
Hay bastante variedad y es la diferencia principal en el caso de que el uso sea para vino tinto o blanco. Las de vino tinto son bastante anchas para que se pueda dejar respirar. Las copas de vino blanco son bastante más pequeñas y estrechas
Copa de agua
Está algo abombadas, por lo que son llamadas copa globo. Son bastante versátiles, por lo que no debe faltar entre la cristalería para bar o restaurante. Se usan para vino, cerveza o refresco.
Copas de champán
Es de boca ancha y poco alta, pese a que actualmente es la que tiene un uso más habitual es la copa flauta que es estrecha y alargada.
Copa de balón
Su forma es más rodeada, siendo más ancha en su parte inferior. Es para brandys, gin tonics y bebidas que se toman a temperatura ambiente.
Copa de jerez
Es de tamaño medio pie y corto. Se usa para vino de jerez, finos y el de Oporto.
Copa hurricane
Se utiliza en toda clase de cócteles, para helados o batidos. Es alargada y se estrecha en la parte central.
Vaso largo
Son fundamentales los bares y pubs, puesto que en ellos valen combinados que por lo general se van a llevar en hielo. Son altos y particularmente estrechos.
Vaso Collins
Es largo y tiene el culo de particular grosor. Es posible que llegue a los 400 ml. Se usa en zumos, refrescos y combinados.
Jarra de cerveza
Es de cristal de particular fortaleza y tiene asa, con lo que la cerveza no se llega a calentar. La capacidad puede ir desde los 350 ml a los 500 ml. Estos son los más importantes, pero hay todavía más.
Esperamos que después de todo lo que hemos relatado, te quede un poco más presente qué es lo que más destaca y que hay que tener en el apartado de cristalería. Seguro que esto te va a ayudar a cualquier elección que tengas que hacer para tu negocio o incluso hasta a nivel particular.
Así que nada, ahora te toca elegir a ti, pues es bastante más sencillo saber qué debes elegir, aunque tú también deberás hacer un ejercicio de reflexión para que sea más sencillo acertar.